Centro Joven de Rivas Vaciamadrid ¿un estorbo para la Comunidad de Madrid?

Somos muchos los y las jóvenes que creemos en la gran labor que se hace desde el Centro Joven de Rivas Vaciamadrid. Un lugar de referencia para muchos de nosotros, donde podemos encontrar la información deseada, la ayuda necesaria, el apoyo psicológico en momentos difíciles, la tranquilidad ante situaciones que nos supera...

Pues bien, desde la Comunidad de Madrid quieren cerrarlo. ¿por qué quieren quitarnos prestaciones a los jóvenes? ¿por qué quitarnos unos espacios donde nosotros encontramos un refugio? pero además...no estamos pidiendo que se invente nada, sino...mantener algo que ya está en funcionamiento y dando buenos resultados.

El argumento de la Comunidad de Madrid: en los centros de atención primaria prestan los mismos servicios que en el Centro Joven. Desde mi modo de ver...un argumento que se cae por su propio peso.

En los centros de atención primaria, nos curan con recetas, pero...¿qué receta existe para ayudar a un joven? ¿qué sucede cuando la cura no se puede prescribir? No nos olvidemos que son muchos los motivos por los que los jóvenes nos acercamos a este tipo de centros: para obtener información, requerir apoyo psicológico, opciones frente al fallo de los anticonceptivos, métodos para dejar el tabaco... entre otras muchas situaciones.

Pues bien, en todas y cada una de las situaciones por las que el joven acude al centro, es recibido en un despacho cerrado donde solo puede oírle el especialista que allí se encuentra. De este modo el joven plantea su situación con total privacidad y desde allí pasa a ser tratado por el especialista más adecuado a la situación.

La Comunidad de Madrid dice que estas prestaciones también se realizan en un centro de atención primaria. Pues bien, por ejemplo, un joven que acude a urgencias del centro de salud en pleno fin de semana, la sala ... repleta de gente y lo primero... preguntarle en esa sala llena de gente ¿qué le sucede? frente a esa pregunta el joven miraría a uno y otro lado y tras ver la cara de vecinos y conocidos ... la opción más probable sería la de darse media vuelta y decir...no se preocupe, volveré otro día. Con lo cual...intentaría resolver la situación el solo, sin ayuda de los especialistas.

Pero... imaginemos que llegamos a la consulta y estamos con nuestro médico de cabecera ¿podremos plantear según que situaciones sin ser juzgados? ¿tendrán el tiempo necesario para explicarme todas las posibilidades? ¿se sentará conmigo para conocer de donde puede venir el problema y como puede solucionarse? ¿me dará una cita semanal de media hora a lo largo de cinco semanas para seguir mi evolución?

Podría poner mil situaciones en las que el centro de atención primaria no puede ayudarnos como lo hace el Centro Joven, pero el principal...los jóvenes no nos sentimos igual entrando por la puerta de un Centro Joven y entrando por la puerta de un centro de salud.

Que nadie os engañe. El Centro Joven es un lugar de referencia que los jóvenes vemos como algo nuestro, como un lugar al que podemos acudir siempre que lo necesitemos, donde los especialistas que allí se encuentran están en contacto directo con las necesidades de los jóvenes... y eso es algo que nunca encontraremos en un centro de atención primaria.

Si como yo, pensáis que el Centro Joven debe mantenerse abierto...os invito a que dejéis vuestra firma digital, yo ya lo he hecho.