Eran las 9.00h de la mañana de este soleado domingo, cuando los globos rosas sobrevolaban el cielo de Madrid indicando el inicio de la Carrera de la Mujer.
Un año más, miles de participantes, ataviadas con nuestras camisetas rosas, recorríamos las céntricas calles de Madrid en esta carrera solidaria contra el cáncer de mama. Desde las más pequeñas en sus carritos empujados por sus orgullosas mamás, hasta las más veteranas de la mano de sus nietas e hijas...todas juntas teñíamos de rosa allá por donde pasábamos, sin olvidar que es más que una carrera... es el simbolismo de la unión, del compañerismo, de la esperanza...
Es una carrera, si, pero...una carrera... en RECUERDO de todas las mujeres que lucharon hasta el último momento para hacerle frente sin poder lograrlo; una carrera... en APOYO a todas esas mujeres que día a día continúan peleando por ganarle la batalla a esta terrible enfermedad; una carrera... de CELEBRACIÓN por todas aquellas que con su esfuerzo consiguieron ganarle la batalla... en definitiva... una carrera POR Y PARA ELLAS.
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