Una bonita tradición....
Cuando era pequeña, recuerdo vivir con ilusión tal día como hoy, para mi...el día de San Jordi. Salía de cada con unas monedas en el bolsillo, que me habían dado la noche anterior mis padres, y caminada ilusionada al cole pensando en que no volvería a casa sin un libro nuevo.
En el colegio, como cada año, nos contaban la historia de San Jordi, el Dragón y ese mágico final donde el Dragón abatido se convertía en una rosa roja.
Una vez recordada la leyenda del famoso caballero, junto con la profe, como si de una excursión se tratase, salíamos del colegio hacia la plaza de la juventud. Una plaza, que el 23 de abril, se cubría hasta el último rincón de fantásticos libros. Paseábamos por los puestos buscando un libro que para nosotros fuese el mejor de todos.
Mirábamos una y otra vez, íbamos de un puesto a otro, volviendo al primero y mirando el mismo libro mil veces...hasta que finalmente nos decidíamos a sacar las monedas del bolsillo y llevarnos a casa NUESTRO LIBRO y LA ROSA ROJA que lo acompañaba.
Una bonita tradición... Una tradición que recuerdo con añoranza e imaginando que la Plaza de la Juventud sigue transformándose en un lugar mágico para los más pequeños.
Feliz Día del Libro. Feliz San Jordi.
(Un año más, en un día como hoy, recupero esta entrada que escribí con anterioridad y que tantos recuerdos me trae)